La Tierra requiere nuestra ayuda. La ecología doméstica no es una moda, sino una necesidad real, y todos debemos poner nuestro granito de arena para contribuir a salvar el planeta que habitamos. Aquí te explicamos 10 consejos para que te unas a la causa y cuides el medio ambiente.
10 trucos de ecología doméstica
¿Sabías que cuando repetimos una acción durante 21 días interiorizamos el hábito y comenzamos a hacerlo de forma mecánica? Puede que al principio te cueste recordar estos consejos, pero en tres semanas la sostenibilidad y la ecología doméstica estarán implantadas en tu hogar. Toma nota de cómo ayudar a proteger el medioambiente en tu día a día.
1. Recicla el aceite vegetal
¿Qué haces con el aceite de la sartén después de freír? ¡No lo tires por el fregadero! El aceite vegetal usado puede tener una segunda vida. Guárdalo dentro de una botella y llévalo a un punto limpio. Con este aceite se fabrican jabones, detergentes, velas e incluso biocombustible.
2. Apaga lo que no estés usando
¿Cuál es la energía que menos contamina? ¡La que no se consume! Es un principio básico de la ecología doméstica. Si vas a pasar varios días fuera de casa, desenchufa el televisor y el router. Si tu móvil ya ha terminado de cargarse, retira el cargador. Sube las persianas para que entre luz natural y apaga las lámparas. Además de cuidar la naturaleza, ahorrarás en la factura.
3. Compra en pequeños comercios
Las grandes superficies a menudo venden el género fresco envuelto en plástico. ¡Una lechuga no necesita ir envasada! Es un atentado contra la ecología. Compra en fruterías, carnicerías y pescaderías de barrio. Los trabajadores autónomos te lo agradecerán y la ecología y tu salud también, pues probablemente encuentres alimentos más naturales. En caso de que vayas a un centro comercial, lleva tu carro de la compra para no usar bolsas y elige los productos que se dispensen a granel.
4. No uses el inodoro como papelera
El retrete no es un pozo que se lo traga todo. Lo que tires dentro irá a parar al mar. Compresas, pañales y bastoncillos de los oídos atascan las tuberías y suponen un grave peligro medioambiental. Recuerda que aunque el papel higiénico sea biodegradable, ¡las toallitas húmedas no lo son! Estas no deben arrojarse jamás al inodoro. Colocar una papelera en el cuarto de baño no supone ningún esfuerzo.
5. Descarta el plástico
Las pajitas y los vasos de plástico no se pueden reciclar. Compra pajitas de metal, vasos de papel y cepillos de dientes de bambú. Asimismo, hay tiendas en las que venden detergente a granel si llevas tu propia botella. Usa jabón en pastilla en lugar de en bote.
6. Ahorra agua
No derroches ni una gota de agua. Mientras te lavas los dientes o te enjabonas el pelo, cierra el grifo para no malgastar. Cuando llueva, pon un cubo fuera para recoger el agua. Te servirá para fregar el suelo y para regar las plantas.
7. Cultiva hortalizas
Tu terraza puede convertirse en huerto si plantas tomateras en macetas. Las plantas absorben CO2 y producen oxígeno. Cuantas más tengas, mejor.
8. Camina
No es necesario coger el coche para ir a la vuelta de la esquina. Ahorra combustible y evita emisiones yendo a pie, que es más sano.
9. Reutiliza
Reutilizar es la clave para alcanzar el objetivo de residuos 0. Los envases de cristal sirven para guardar las sobras de alimentos. Usa tu ropa todas las veces que puedas y cuando ya no la quieras, conviértela en trapos para limpiar.
10. Invierte en eficiencia energética
Acondiciona tu hogar. Unas buenas ventanas evitan que se escape el aire acondicionado. Esta inversión económica merece la pena porque ahorrarás energía.
Siguiendo estos consejos de ecología doméstica, entre todos haremos un mundo mejor. Las generaciones venideras nos lo agradecerán.